Carta del mes
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Una nueva Pascua
Montevideo, 7 de abril de 2007.
Querida Familia:
La Pascua para creyentes o no es una ocasión de reunión familiar, unos más otros menos. Es que es en la familia donde cada persona puede recuperar la energía que el trajín de la vida va desgastando. Oportunidad ineludible para demostrar con palabras y con demostraciones de afecto, lo importante que son esos seres queridos que comparten con nosotros una historia familiar.
“¿Cuál es el sentido de la vida?”, es y será una pregunta que todo hombre en algún momento de su existencia se pregunta. Las respuestas según las circunstancias pueden ser muchas pero si hiciéramos una encuesta nos encontraríamos con una amplia mayoría del resultado: “mi familia”.
Este mes en Sembrar Familia les ofrecemos el impresionante testimonio de Alejandra Forlán que a causa de un accidente automovilístico luchó por su vida y nos confirma que el motor de su lucha por vivir fue el amor a su familia.
La vida es corta y pasa volando. Hay que vivirla agradecido por nuestros afectos y sabiendo mostrar ese amor por ellos cada día…como si fuera el último.
Y a la vez volviendo al mensaje de la Pascua, para creyentes o no, hay una vida mejor después de ésta. Todo depende del amor con que tratemos a los demás. Y qué mejor ejemplo de ello es quien dio la vida por sus amigos, por la humanidad entera: Jesucristo.
¡Hasta la próxima!