Carta del mes
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¡Feliz día a todas las Madres!
Querida Familia,
En más de 40 países del mundo se conmemora en algún domingo del mes de Mayo el día de la Madre.
¿Por qué Mayo?
Una muy buena hija, Anna Jarvis, hija Anna Reeves Jarvis (una activista que luchó por los derechos de las comunidades apalaches durante la Guerra de Secesión Norteamericana). En 1905 Anna perdió a su madre y comenzó a persuadir a políticos y líderes de opinión que se consagrara el segundo domingo de Mayo (aniversario de la muerte de la suya) como día de la Madre, logrando la creación de un feriado nacional en Estado Unidos en 1914.
Pero también en Mayo es primavera en Europa y es cuando se realizan la mayor cantidad de fiestas y procesiones en honor de la Santísima Virgen, quien es para muchos la Madre por antonomasia.
Destacamos la importancia de ese día, aunque las quejas sobre la mercantilización del día de la Madre son ya un tópico (la misma Anna Jarvis declaró años más tarde estar arrepentida de haber impulsado a crear un día de festejo para los comerciantes y no para las madres); porque nos ayuda a reflexionar y homenajear al eje de la familia, a la Madre.
Un viejo adagio latino dice: “coruptio optimi péssima” la corrupción de los mejores es lo peor. Esto significa, que cuando la mujer, la madre, se corrompe, sucede lo peor; la crisis completa de la familia que -tristemente- presenciamos en estos días.
Es por esto que con más razón hay que honrar, venerar y alentar a todas las buenas madres que nos rodean.
Para esto tomamos prestadas las palabras de Juan Pablo II: “te doy gracias, mujer-madre, que te conviertes en seno del ser humano con la alegría y los dolores de parto de una experiencia única, la cual te hace sonrisa de Dios para el niño que viene a la luz y te hace guía de sus primeros pasos, apoyo de su crecimiento, punto de referencia en el posterior camino de la vida”.
¡Hasta la Próxima!