Carta del mes

• Oda a la vida 1-05-2013

  Querida Familia:

   

                  Cuando nos detenemos a observar la naturaleza quedamos impresionados por la belleza y sabiduría de la creación. En otoño el paisaje de pinta de tonalidades ocre, que se combinan y entremezclan con el verde y en primavera luego de meses con colores grises, resurge el verde con infinidad de colores que proporcionan las flores, es cómo si la naturaleza nos recordara el respeto por la vida, los días son más largos, el sol más cálido y fuerte y los animales salen, dejándose ver y proporcionándonos su canto cómo es el caso de los pájaros.

                  Esto si admiramos la naturaleza, pero si nos detenemos a observar  la concepción y el nacimiento, más admirados quedamos;  desde que él bebe es concebido, estamos en presencia de la vida; cuando aún no se siente en el vientre de la madre ya se puede ver por medio del ecógrafo el latir del corazón y sus formas. Y cuando nace son delicados, tiernos e indefensos; vienen al mundo para desarrollarse y aprender hasta lograr su independencia y en ese camino nos continúan transmitiendo ternura y amor, aunque también algunos dolores de cabeza que van quedando atrás en la medida que los ayudamos a crecer como personas de bien.

                  Es hermosa la vida, con sus alegrías y tristezas, lástima que muchas veces las personas interferimos con el devenir natural,  provocando daños cómo el de quitar el derecho a la vida. Ojalá demos la oportunidad y el derecho a nacer a todos los niños del mundo.

   

  ¡ Hasta la próxima!